
La agrovoltaica está ganando protagonismo como una tecnología clave para el
desarrollo sostenible, pero muchas personas se preguntan: ¿Cómo funciona
realmente? En este artículo, te lo explicamos paso a paso de manera sencilla para que
entiendas cómo los módulos fotovoltaicos pueden coexistir con los cultivos y aportar
beneficios mutuos.
La agrovoltaica combina las actividades agrícolas con la producción de energía solar
en la misma superficie de terreno. Esto se logra mediante la instalación de módulos
fotovoltaicos elevados o semitransparentes en campos de cultivo. A diferencia de las
instalaciones solares tradicionales, los sistemas agrovoltaicos están diseñados para
optimizar la fotosíntesis de los cultivos y después utilizar la radiación que les “sobra” a
los cultivos para convertirla en energía.
Los módulos suelen instalarse a una altura suficiente para permitir el paso de
maquinaria agrícola y, en algunos casos, incorporan seguidores solares que ajustan la
orientación de los módulos durante el día.
1. Módulos fotovoltaicos: El elemento esencial para la captación de energía
solar. Pueden ser estáticos o móviles (con tecnología de seguimiento).
2. Estructuras de soporte: Diseñadas para garantizar la estabilidad y permitir
suficiente espacio libre para la maquinaria y el crecimiento de los cultivos.
3. Sistema de orientación (opcional): Los sistemas de seguimiento solar
optimizan la captación de energía y pueden ajustarse según la necesidad de
luz del cultivo.
4. Sistema de gestión de agua: Algunos proyectos incluyen tecnologías de
recogida de agua de lluvia o sistemas de riego automatizados.
Uno de los factores más importantes en la agrovoltaica es la distribución de la luz.
Aunque podría parecer que la sombra de los módulos es un inconveniente, en muchos
casos, esta sombra parcial puede ser beneficiosa.
1. Diseño estructural: Las soluciones específicas para sistemas agrovoltaicos
están diseñadas para no interferir en las actividades agrícolas y conseguir una
buena eficiencia energética. Estas estructuras ajustan su inclinación y
orientación a las necesidades de los cultivos y las condiciones locales.
2. Módulos fotovoltaicos semitransparentes: Este tipo de módulos permite el
paso de cierta cantidad de luz, lo que beneficia el crecimiento de los cultivos.
3. Módulos fotovoltaicos bifaciales: Captan luz por ambas caras, aumentando
la eficiencia energética.
4. Sensores de luz y humedad: Monitorizan en tiempo real las condiciones del
entorno para optimizar tanto el rendimiento agrícola como el energético.
5. Sistemas de seguimiento solar: Ajustan la posición de los módulos para
maximizar la captación solar según la hora del día.
1. Diseño estructural: Las soluciones específicas para sistemas agrovoltaicos
están diseñadas para no interferir en las actividades agrícolas y conseguir una
buena eficiencia energética. Estas estructuras ajustan su inclinación y
orientación a las necesidades de los cultivos y las condiciones locales.
2. Módulos fotovoltaicos semitransparentes: Este tipo de módulos permite el
paso de cierta cantidad de luz, lo que beneficia el crecimiento de los cultivos.
3. Módulos fotovoltaicos bifaciales: Captan luz por ambas caras, aumentando
la eficiencia energética.
4. Sensores de luz y humedad: Monitorizan en tiempo real las condiciones del
entorno para optimizar tanto el rendimiento agrícola como el energético.
5. Sistemas de seguimiento solar: Ajustan la posición de los módulos para
maximizar la captación solar según la hora del día.
En varios proyectos en Francia y España, se han implementado sistemas
agrovoltaicos en cultivos de viñedos, olivares, frutales, diferentes hortalizas…
Un buen ejemplo son pilotos llevados a cabo en Francia en los que se han conseguido
aumentos del rendimiento de +45% en vid garnacha blanca, +30% cerezo burlat y
+23% en pepino entre otros resultados.
Además, el Informe del TFZ (Centro de Tecnología y Demanda en el Centro de
Competencia de Recursos Renovables alemán): Agrovoltaica, situación y cuestiones
pendientes, afirma que la agrovoltaica puede reducir la necesidad de riego, en algunos
casos se ha observado una reducción de hasta el 30% en el consumo de agua en
instalaciones agrovoltaica.
La agrovoltaica representa una revolución en la forma en que gestionamos los
recursos naturales. Al entender su funcionamiento, es fácil ver por qué esta tecnología
está atrayendo la atención a nivel mundial. Con los avances continuos en el diseño de
sistemas y las investigaciones en marcha, el potencial de la agrovoltaica para
transformar la agricultura y la generación de energía es inmenso.
En las próximas publicaciones, exploraremos aún más beneficios, retos y casos de
éxito.